Física de la vida cotidiana. Tarea 4.1. Un trampatojo

The Waterfall, Escher

En las clases 3 y 4 de la asignatura Física de la vida cotidiana se tratan los trampantojos, es decir de cómo el cerebro nos engaña cuando interpreta la información que le llega. Pensando en las ilusiones ópticas me he acordado de Escher, considerado el maestro de las ilusiones ópticas. En muchas de sus obras plasmaba figuras imposibles o contrarias al sentido común. Con su obra artística exploró cómo crear figuras paradójicas.

Un claro ejemplo de ello es la obra The Waterfall en la que se puede apreciar una cascada de agua.  En la obra se ve un pueblo en una ladera y en el centro una especie de acueducto con una cascada que mueve una rueda. Aunque en un primer vistazo no veamos nada extraño si se observa con detenimiento el agua, vemos que algo no tiene sentido. El agua de la cascada cae desde lo alto de la construcción hacia abajo moviendo la rueda. Sí seguimos el camino del agua vemos que parece ascender hacia arriba. Este movimiento del agua no tiene sentido, es una ilusión creada por interpretar en tres dimensiones una representación de dos dimensiones.

Para realizar esta obra Escher se basó en el triángulo de Penrose el cual es una figura imposible, solo tiene sentido sobre el papel. Escher introdujo dos de estos triángulos y cerró el ciclo. Desde mi punto de vista el hecho de haber añadido el elemento del agua a la obra es esencial para recalcar el sinsentido. Si viéramos solo un edificio construido basado en dos triángulos de Penrose nos daríamos cuenta de que es una figura imposible pero no iríamos más allá. Sin embargo, al añadir el agua podemos analizar el flujo y queda más patente que va en contra de las leyes físicas. Es un tema que da mucho que pensar, para mi es una obra de arte magnifica.